MÁSCARA MORTUORIA DE FRANCISCO DE BORJA

La máscara mortuoria es un elemento funerario usado desde la antigüedad como recuerdo del difunto y solían estar elaboradas en diversos materiales como el oro, la madera, o como en el caso de Gandia, en yeso a través de la técnica del vaciado.

Mide 26 cms de altura y fue realizada en posición frontal y con los ojos cerrados. Posee esbozados la barba y el bigote. La primera versión se perdió en Madrid en mayo de 1931, y la conocemos gracias a la versión romana conservada en la iglesia del Gesú. Otras dos versiones fueron hechas: una depositada en Loyola y la que tenemos hoy en día en el Palau Ducal dels Borja de Gandia.

El valor de esta pieza no es tanto el material con el que se realiza sino el hecho de ser una de las primeras imágenes de Francisco de Borja tras su muerte, y que servirá como referencia iconográfica a muchos de los artistas posteriores.